en la cañada
«…En la cañada, a la vera de un charco casi seco, se apelotonan las ovejas. Recargadas del cansancio sobre los cuartos traseros, menean la sufrida cola grasa; el polvo provoca en ellas estornudos desgarradores. Cerca de la presa un becerro grandote, afincado en las patas traseras, chupa a una oveja de un amarillo sucio. De cuando en cuando topetea las ubres maternas; la oveja gime, se encorva y deja escapar la leche; me parece que tiene sufrimiento en la mirada.
El abuelo Zajar esta sentado de perfil. Se arrancó la camisa de punto y, cegarato, busca a tientas algo en los pliegues y costuras. Al abuelo le queda un año para los setenta. Su espalda desnuda está cubierta de intrincadas arrugas, los omóplatos despuntan angulosos bajo piel, pero tiene ojos azules de chaval y una mirada rápida y penetrante bajo las cejas grises.
Aguanta con dificultad el piojo atrapado en los temblones dedos secos, lo sujeta con cuidado y ternura, lo pone en el suelo, a distancia de sí, traza una pequeña cruz en el aire y refunfuña con voz sorda:
—Anda, animalejo, ¿quieres vivir, eh? No faltaba más… Cómo te has hinchado…, latifundista…
El viejo se pone la camisa con un gemido y, recostando la cabeza, sorbe de una colodra el agua recalentada. Con cada trago le sube la nuez, del mentón al cuello le cuelgan dos pliegues fláccidos, las gotas le corren por la barba; a través de los párpados de azafrán entornados trasluce rojizo el sol.
Tapa la colodra, me mira de reojo y, al chocar con mi mirada, mastica secamente con los labios y se pone a observar la estepa. Más allá de la cañada, la calina rutila, el viento sobre la tierra calcinada tiene olor a miel de tomillo. Después de un silencio el abuelo aparta el cayado de pastor y con el dedo quemado por el tabaco señala a lo lejos…»
Esta evocadora descripción pertenece a La Estepa de Añil, es uno de los Cuentos del Don (El Don Apacible) de Mijail Shólojov.
Cuentos del Don (El Don Apacible) fue la primera obra narrativa de Mijail y publicada en 1925. Shólojov está considerado por alguos sectores como el Tólstoi del proletariado.
Mijail Alexandrovich Shólojov había nacido en Vechenskaïa, a orillas del Don el 24 de mayo de 1905 y en donde moriría setenta y ocho años despues, esto es en 1984. Fue el máximo exponente del realismo socialista soviético. Recibió el Premio Nobel de Literatura en 1965. Durante muchos años fue delegado del Soviet Supremo, persiguió a otros escritores que habían sido declarados enemigos del estado, com Boris Pasternak, Alexander Soljhenitsyn, o Siniavski. Independientemente de todo lo que se ha escrito acerca de la autoría de Cuentos del Don, en estos cuentos se manifiestan los grandes escenarios y los dramas del colectivismo y realismo soviético.